Desmarcada del calendario, y soberana, va la poesía por todo sitio donde exista un ser capaz de apreciarla; sin embargo, cada 21 de marzo –desde 1999 y por acuerdo de la Unesco en su 30ma. Conferencia General– se celebra el Día Mundial de la Poesía, que nace como una necesidad de honrar a los creadores, de revivir las tradiciones orales, y promover la lectura, la escritura, y la visibilidad de este género mayor.