El inicio de la colaboración médica internacional hace 62 años marca una de las páginas más hermosas y nobles en la historia de la Revolución cubana. A lo largo de más de seis décadas, especialistas de la salud de nuestra Isla han brindado atención a millones de personas en 165 países, y han llevado esperanza y sanación a quienes más lo necesitan.
En esta noble labor se destaca el doctor Enedy Pérez Herrera, un profesional con 35 años de servicio en el sector de la Salud, quien actualmente trabaja en urgencias en el Policlínico Docente Mártires del 8 de abril de Quemado de Güines.
Con un admirable historial de cinco misiones en el extranjero, dos de ellas como parte del Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias Henry Reeve, Enedy Pérez ha sido testigo directo del impacto transformador de la medicina cubana en el mundo:
«He cumplido misión en cinco países, bajo diferentes modalidades, incluyendo programas integrales de Salud en Venezuela y Guinea Ecuatorial. Me siento muy feliz de haber realizado estas misiones, pues me aportaron grandes experiencias y la oportunidad de conocer otros protocolos que se aplican en distintos contextos. Los cubanos siempre destacamos por nuestra labor incondicional y nuestro profundo humanitarismo. Para nosotros, el interés de la Medicina no es cobrar, sino trabajar con amor y dedicación para que el paciente se sienta satisfecho y agradecido por todo lo que hacemos».

El ejército cubano de batas blancas, a lo largo de más de sesenta años, ha llevado amor y solidaridad a los rincones más necesitados del planeta, ha enfrentado desastres naturales y crisis sanitarias con valentía y altruismo. El doctor Enedy Pérez asegura que formar parte de la brigada Henry Reeve ha sido una de las experiencias más significativas de su vida.
Sobre sus misiones más impactantes, el doctor Pérez Herrera relata:
«Las misiones que más me han marcado, de las cinco, fueron en Pakistán y Chile, ambas con las brigadas Henry Reeve. En 2005, el Comandante en Jefe seleccionó a un grupo de médicos con condiciones y preparación específicas para fundar esta brigada que fue a Pakistán. Esa experiencia me impresionó muchísimo porque las urgencias médicas eran constantes, día a día; estábamos en movimiento continuo ante desastres naturales, ayudando al pueblo paquistaní. En 2010, fui a Chile por otro terremoto. Allí también trabajamos con gran vigor en las urgencias médicas, y luego abordamos las enfermedades de transmisión digestiva y respiratorias, causadas por el hacinamiento de los pacientes. Tuvimos que trabajar con tremendo esmero, y logramos poner en alto el nombre de nuestro país».
Desde aquel histórico 23 de mayo de 1963, cuando Cuba envió su primera brigada médica internacional de manera permanente a la República de Argelia, hasta el día de hoy, nuestros profesionales han brindado servicios a millones de personas en diversas regiones del mundo. Más allá de las cifras, han demostrado a través de su dedicación y sacrificio el verdadero significado de la solidaridad humana.