Se nos fue el 2024. Apenas nos alcanzó el tiempo, entre tantas vicisitudes, para confraternizar, aunque sea por esta vía digital.
Tenemos que asumir que los días apacibles no los tendremos más. Esta Cuba que se empina día a día exige de todos más entrega, compromiso, inteligencia y un ingrediente fundamental: la UNIDAD. Esa es la virtud que siempre ha caracterizado a la Radio Cubana y en 2025 estoy segura de que no será menos, seguiremos siendo una gran familia. Gracias a los que se mantienen sosteniendo la obra.
Bienvenidos los que llegaron este 2024 y se asoman con amor y pasión al medio más humano que existe: la Radio. A ella le entraremos con fuerza en el nuevo año para que avance, para transformar lo que merezca cambio y siempre para acompañar a las audiencias, por ellas existimos.
Gracias por hacerme más llevadera la travesía, sin ustedes no sería posible. Los abrazo fuerte, reciban de conjunto con su familia todo mi afecto sincero. ¡Feliz y próspero 2025!