Natural de Villa Clara, se involucró desde muy joven a la lucha revolucionaria con el Movimiento 26 de Julio y en los primeros años del triunfo de enero de 1959 a la diplomacia revolucionaria en países como Ecuador y Chile, donde comenzaría a establecer su relación con la profesión periodística y con la emisora en la que se convertiría en un emblema profesional, Radio Habana Cuba.
Martínez Pírez dejó una huella de profesionalidad y servicio a la Patria en numerosos medios de la prensa escrita, la Radio y la Televisión, y fue fundador y director de la Revista OCLAE.
Esa hoja de servicios le valió el Premio Nacional de Periodismo en Televisión en 1989, el Nacional de Periodismo en Radio, 1991, el Nacional de Periodismo José Martí por la Obra de la Vida , en 2005, y Nacional de Radio en 2006.
Su impronta está también en el Parlamento nacional, el internacionalismo cubano en África como corresponsal de guerra y maestro de la profesión, y como profesor titular de la Universidad de La Habana.
Los colegas reconocían en él un testimoniante de episodios claves de la historia cubana y latinoamericana posterior a 1959 y un cultivador de la hermandad con personalidades relevantes y pueblos de nuestra región. Su labor diplomática y periodística lo haría muy cercano a figuras como Osvaldo Guayasamín y Salvador Allende, por mencionar dos de las muy entrañables para Cuba.
En 1973 se integró a la emisora Radio Habana Cuba, donde se le reverenció siempre, como en todo el gremio periodístico, como un naestro. Allí fue redactor, reportero, guionista, conductor, Jefe de Redacción, Director de Información y Subdirector General a cargo de la política editorial, función que realizó por más de treinta y cinco años.
Su alto reconocimiento le llevó a formar parte del jurado del Premio de la revista Casa de las Américas, en el género testimonio.
Por su patriotismo apasionado y fervoroso fue merecedor de la Réplica del Machete de Máximo Gómez del reconocimiento Utilidad de la virtud.
Esa fue la vida toda de Pedro Martínez Pírez, virtuosa y de servicio a su patria hasta el último suspiro. La Unión de Periodistas de Cuba pierde uno de sus más prestigiosos miembros, su Cuba un hijo ejemplar y su familia un padre amoroso.
Llegue a su esposa, hijos, nietos y demás familiares y sus compañeros nuestro abrazo en esta hora de dolor.