The perfect couple
Susanne Bier regresa a la pantalla chica con la serie “The Perfect Couple” adaptación de la novela de Elin Hilderbrand.
Amelia está a punto de casarse con una de las familias más ricas de Nantucket. Pero cuando aparece un cadáver el día de su boda, de repente todo el mundo es sospechoso.
La N roja la estrena porque tiene todos los ingredientes para convertirse en un éxito que se ve de un atracón. Un asesinato, una mansión y sospechosos, muy Agatha Christie, una fórmula que se repite constantemente, pero que en “The Perfect Couple” funciona muy bien.
Hay suspenso, inesperados giros de guion, el ritmo es vertiginoso y nada es predecible. Cada episodio es un interrogatorio, una duda en el espectador y todo eso apoyado mediante entrevistas y flashbacks.
El guion es ligero, se le ha comparado con “Big little liars” y no tienen nada que ver, esta serie es de Netflix, o sea, buscar atraer mucho público y ser palomitera.
Su reparto es otro ejemplo de cómo funciona el algoritmo para ganar visionados. Nicole Kidman, iluminada, reina como siempre, la madre intensa y sobreprotectora, muy convincente. Liev Schreiber, Eve Hewson, Dakota Fanning y Billy Howle menos atractivos.
Susanne Bier es una directora a seguir más en TV, que en cines, “The Perfect Couple” es una adictiva.
El pingüino
Matt Reeves logró con “The Batman” darnos una visión del murciélago poco antes vista en el cine y Pattison demostró que puede hacer lo que sea.
El villano en esa ocasión fue El pingüino, nadie esperaba, nadie pidió un spin off sobre Oswald y sin embargo, ¡qué gran serie tenemos!.
HBO Max la ha estrenado bajo la dirección de Lauren LeFranc.
Sigue la lucha de Oswald “Oz” Cobb por hacerse con el control de Gotham. Con la ciudad destrozada después del colapso de los diques, Oz busca llenar el vacío de poder que dejó la muerte de Carmine Falcone y darle a su madre Francis la vida que siempre le prometió. “El pingüino” es la producción criminal que hace rato no teníamos en la televisión.
Oscura en tono, en forma, con el mismo ritmo y estilo que Reeves establecía en la película, por algo figura como productor.
Otro villano que no será ejemplo ni modelo para nadie, que no busca reivindicarse ni el perdón, simplemente es fiel a sí mismo.
Primera vez para LeFranc y parece que lleva más tiempo en una silla de dirección. Lo que más aplaudo es que no cae en estereotipos de series de acción, los disparos y la violencia son las justas y tampoco es cine negro.
Este ha sido el año de Colin Farrell, qué actorazo, primero fue Sugar y ahora es Oswald. Se me olvida Dany Devito y me aterra ver que además de la espectacular caracterización física, da una de las mejores actuaciones televisivas de los últimos tiempos.
No es una serie para todo el mundo, incluso, tal vez fanáticos de Batman la rechacen, pero ciertamente “El pingüino” es diferente y ya por eso hay que verla.
Monsters
En agosto de 1989, los hermanos Lyle y Erik Menéndez, asesinaron a tiros a sus padres, José y Mary Louise ‘Kitty’ Menendez. Mientras que la acusación alegó que buscaban heredar la fortuna familiar, los hermanos afirmaron —y siguen afirmándolo hoy en día, mientras cumplen cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional— que sus actos se debieron al miedo que sentían tras toda una vida de abusos físicos, emocionales y sexuales, a manos de sus padres.
Esta es la historia de la segunda temporada de “Monsters” de Ryan Muprhy.
Dahmer supuso una desilusión monumental para mí, me acerqué a esta serie con reservas. Curiosamente, a medida que voy descubriendo los hechos, me ha atrapado.
Murphy, obsesionado con los enfermos mentales, la violencia y la oscuridad del alma, busca historias que hayan sido mediáticas para poder llegar a más públicos.
El caso de Lyle y Erick realmente es insólito, pero más inaudito fue la vida que llevaron y lo que supuestamente les hicieron sus padres.
Me intriga más que “The People” v. O.J. Simpson o “El asesinato de Gianni Versace”, otra antología de Murphy
En cada episodio se analiza la personalidad de los hermanos, cómo eran José y Kitty hasta que llegamos al desenlace de todo el proceso judicial.
Hay algo que aplaudirle a Murphy y es la sobriedad, el alejarse del morbo y de graficar ciertas escenas que le hubieran hecho daño a esta temporada, un deja vu con AHS.
La puesta en escena, la banda sonora, el vestuario vuelven a ser redondos.
De protagonistas tenemos a Nicholas Alexander Chávez y Cooper Koch que no están muy bien en el comienzo pero que luego si dan bastante miedo. En el rol de progenitores Javier Bardem y Chloë Sevigny.
Bastante redonda, sádica y bien estructurada por su creador que se resiste a que historias como estas queden solo en internet.
Grotesquerie
Nueva serie de terror de temporada “Grotesquerie” en Hulu
Un detective y una monja investigan una serie de crímenes atroces que parecen personales, mientras lidian con problemas personales y descubren una siniestra red que plantea más preguntas que respuestas.
En la dirección no podía ser otro que Ryan Murphy que busca reaventarse en el género y en el mismo universo que él ha creado.
Religión y crimen se dan la mano en este thriller que no se parece a AHS, “Vigilante” o “Scream Queens”
“Grotesquerie” es distinta porque tiene más de suspenso psicológico que de terror propiamente.
No estamos ante una carnicería visual, no hay gore, las imágenes son sutiles, pero cuando llega el momento de mostrar un asesinato el productor no lo duda y nos deja sobresaltados.
Se presta más atención a los dilemas personales de los protagonistas que al propio asesino en serie.
La policía, con un esposo en coma al que odia, su hija que sufre de sobrepeso y en el otro extremo una monja y un sacerdote que tienen que luchar con sus propios demonios.
Si se analiza la televisión actual, series de terror que valgan la pena, que estén bien realizadas están en falta. “Grotesquerie” es un soplo de aire fresco.
De protagonistas Niecy Nash y Lesley Manville tienen química, creíbles en sus ejecuciones
Esperemos que “Grotesquerie” tenga una temporada gratificante como lo han sido sus dos primeros episodios.
Romper el círculo
Cada día es más evidente que cualquier bestseller al llevarse a la taquilla termina siendo un desastre, sobre todo los más contemporáneos.
“Romper el círculo” fue escrita por Colleen Hoover ahora llega a la pantalla grande de la mano de Justin Baldoni.
Lily Bloom es una mujer que se sobrepone a una infancia traumática para embarcarse en una nueva vida en Boston y perseguir su sueño de abrir su propio negocio. Un encuentro casual con el encantador neurocirujano Ryle Kincaid desata una intensa conexión entre ellos, pero al tiempo que ambos se enamoran profundamente, Lily comienza a ver en Ryle aspectos que le recuerdan la relación que tenían sus padres. Cuando el primer amor de Lily, Atlas Corrigan, repentinamente reaparece en su vida, su relación con Ryle da un vuelco, y Lily se da cuenta de que debe aprender a confiar en su propia fuerza para tomar una difícil elección para su futuro.
El primer gran error es que Baldoni se ponga detrás de cámara, sin experiencia, actor y con solo dos películas mediocres en su filmografía, todo iba y salió mal.
Su metraje exasperante de 2 horas es innecesario porque no hay historia para tanto tiempo.
No sé hasta qué punto el guion es fiel a la obra literaria, pero lo que yo vi me pareció insultante.
Supuestamente se hablaba de dar visibilidad a la violencia de género pero “Romper el círculo” es una comedia romántica de Disney
Todo se sugiere, nada es explícito, incluso me cuestiono realmente que Lily fuera violentada.
La película se ve como si el mundo fuera barbieland, la banda sonora es empalagosa, al igual que esos saltos temporales terriblemente filmados
Con el estreno de la cinta y sus 310 millones de dólares recaudados también salieron a la luz los chismes de lo mal que se llevaban sus protagonistas.
Blake Lively es la esposa de Ryan Reynolds y ese es quizás el papel que interpretará toda su vida, su corta carrera ha estado marcada con filmes sosos y claro sobreactúa.
Justin Baldoni no tiene un momento de credibilidad, no dudo que se llevaran mal, pero es que la calidad de la producción va más allá de eso.
“Romper el círculo” es bastante vergonzoso, ninguna mujer debería sentirte empoderada, tampoco creo que se defienda el feminismo.
American Sports Story: Aaron Hernández
Ryan Murphy el productor más prolifero del 2024 inicia una nueva serie de antología que se centrará en un evento destacado sobre una figura del deporte, y que se narrará a través de la perspectiva de múltiples personajes.
American Sports Story: Aaron Hernández nos lleva desde la infancia de Hernández, su adolescencia cuando empezó a destacar en el deporte más famoso de Estados Unidos, y nos muestra la dura situación familiar que empeora con el miedo del joven de que su padre descubra que es bisexual. Como ya es habitual la producción llega de la mano de Fox
Es Murphy por todas partes, su estilo, su ritmo y su mirada a lo criminal.
No creo que exista otro director con una obra tan amplia sobre hechos reales escabrosos.
La serie al igual que American Crime Story resulta interesante desde el punto de vista de lo que te cuentan, de cómo te vas adentrando en la mente del asesino, como tenía una doble vida y lo perdió todo.
No mucho después de convertirse en campeón de conferencia, el jugador es arrestado por el violento asesinato de Odyn Lloyd, y a raíz de esto, descubren que podría estar relacionado con otras dos muertes ocurridas un año antes en la ciudad de Boston. Además, salieron a la luz otros episodios violentos durante su etapa universitaria, dejando claro que la persona que todo el mundo adoraba en Massachusetts, hogar de los Patriots, era en realidad un monstruo.
Lo que no me convence de la serie es la selección del casting.
Josh Andrés Rivera como protagonista es totalmente inexpresivo, sobreactúa y no me da los matices de un deportista, su ambigüedad.
Vendrán más temporadas polémicas y que nos conmocionen, sabemos que Ryan Murphy no descansa
Rebel Ridge
A veces Netflix te sorprende con alguna película que no es lo que pensabas y eso ya es un milagro
Jeremy Saulnier ( Noche de lobos , Green Room ) estrena “Rebel Ridge”
Un ex-marine se abre paso a través de una red de corrupción en un pequeño pueblo cuando un intento de pagar la fianza de su primo se convierte en un violento enfrentamiento con el jefe de la policía local.
La violencia racial policial es una antigua práctica del racismo estructural, el asesinato de George Floyd, asfixiado por un oficial de policía en Estados Unidos, ha vuelto a hacer visible el grave problema de racismo y violencia policial en ese país
Si algo tiene exagerado el filme es que dure dos horas, pero como se van desarrollando los acontecimientos no te aburre.
El protagonista no es Liam Neeson vengándose, no es John Wick, es un hombre común, un ciudadano que por ser negro experimentará todo el odio de la policía. Es interesante como Saulnier a medida que avanza lo va poniendo en situaciones más complicadas hasta llevarlo al extremo. Todo el sistema esta corrupto, podrido, la crítica social funciona, es certera.
De protagonista Aaron Pierre a quien hemos visto en Intruso, El ferrocarril subterráneo y Krypton, no es buen actor, sin embargo en pantalla resulta creíble.
Rebel Ridge es una película que incomoda y al mismo tiempo llama a la reflexión urgente de la sociedad
El cuervo
Se puede decir que Rupert Sanders es un realizador valiente, falla en todo lo que hace pero al menos lo intenta.
Rodó “Blancanieves y la leyenda del cazador” , llevó al cine el manga “Ghost in the Shell” y ahora se atreve a pasar por encima de maldiciones y culto con el innecesario remake de “El cuervo”.
Eric Draven y Shelly Webster son brutalmente asesinados cuando los demonios de su oscuro pasado les alcanzan. Ante la oportunidad de sacrificarse para salvar a su verdadero amor, Eric se propone vengarse despiadadamente de sus asesinos, atravesando el mundo de los vivos y los muertos para saldar sus deudas.
El cuervo del 94 ha pasado a la historia como una producción maldita y la figura de Brandon Lee quedo inmortalizada
No había necesidad de volver sobre la historia, sobre todo para hacer esta bazofia
La película no parece un remake, es más bien como una historia de venganza gore violenta al menos cuando se acerca al final.
Su primer tramo de drama romántico es bastante desacertado y la historia de Ale Proyas que era oscura, aquí se convierte en algo de fantasía casi al estilo de superhéroes
Efectos malos, coreografías nada sugerentes y un apego a lo fantasioso que no comprendí, hacen de la nueva “El cuervo” un título comercial burdo. A nivel estético y sonoro no es interesante ni original
Bill Skarsgård se ha convertido en el ícono de todo lo terrorífico en esta nueva época, no tiene ni la personalidad, ni el misterio que desprendía Brandon
Recomiendo ver la original y si decides lanzarte a este reto imagina que es un filme comercial que intenta ser remake y al final es una calamidad
Close to you
Elliot Page protagoniza su primera película como hombre trans, el drama Close to you
Sam tiene la oportunidad de encontrarse con un viejo amigo de camino a casa para asistir a una temida reunión familiar que le obliga a enfrentarse a recuerdos enterrados hace mucho tiempo.
Dirigida por Dominic Savage esta película es todo lo que se espera de un reencuentro familiar con alguien que regresa y tiene mucho que compartir
Una familia que aún no acepta el cambio, que aún no lo entiende, que se cuestiona su crianza y Sam debe lidiar con todo ello
No hay grandes logros cinematográficos, es un filme de bajo presupuesto, de apenas locaciones pero lo verdaderamente importante es lo que te están contando
“Close to you” es un testimonio trans, es una mirada al dolor de estas personas que son rechazados por su familia y cuánto les cuesta volver a su hogar y recuperar sus vidas
La primera escena donde aparece Sam vistiéndose me resultó impresionante y necesaria para lo que venía a continuación
Ya habíamos visto a Page en “Unbrella Academy” como hombre, pero aquello era una serie de superhéroes no había tanto drama, ni tanto llanto
Su desempeño actoral bebe mucho de su propia experiencia personal, tal parece que se interpreta a sí mismo en una especie de liberación catártica frente a la cámara
Se agradece que Dominic Savage ruede este tipo de historia, tan reveladora y dolorosa