El reconocimiento se entrega a quienes han sido impulso y soporte vitales en pos de la cultura.
«No se cansa Leyda de ser fiel a sus mayores, a la verdad, a la justicia, al arte, a sí misma», fueron palabras de un amigo de siempre, Eduardo González.
El Premio fue entregado por Osmany Gálvez, director del Centro Provincial del Libro y la Literatura; en nombre de la UNEAC su presidente Ricardo Riverón le obsequió un ramo de flores, y una Patacucha pintada por Marvelys Marrero fue el regalo que puso en sus manos Fidel Ernesto Fidel Ernesto Tejeda Rodríguez, subdirector provincial de Cultura.
Los trovadores Alain Garrido, Leonardo García y Roly Berrío regalaron canciones a Leyda, la eterna cómplice del talento joven.