«Muchos confunden currículo con matemáticas, y se preguntarán si sólo dos libros (luminosos) tiene publicados. Diré con justicia; Carmen Sotolongo es nuestra Rulfo, aunque no se la pasa escribiendo sobre los muertos, sino prefirió el riesgo de estudiar a los vivos», añadió.

«Tiene suficiente autoridad para enseñar poesía a los poetas, y dos horcones centrales sustentan su obra: el texto del Guiñol santaclareño y una suma de ensayos sobre poetas coterráneos», argumentó. 

«Jamás ha priorizado Carmen su carrera como escritora; ha sido harto desganada para luchar por sus publicaciones esta mujer que siempre escribe enseñando», expresó entre las ideas esenciales. Y  concluyó así su texto: «Cristiana fiel, nos ha hablado desde el monte. Es que Carmen, definitivamente, significa verso, lucidez, modestia, bienaventuranza».

En la ceremonia que clausuró la edición 32 de la Feria en el patio de la UNEAC, el Guiñol de Santa Clara le regaló un espectáculo que la emocionó visiblemente; un tango, su preferido; un ramo de rosas, y recibió de Serguey Pérez Pérez, director provincial de Cultura y Omar Rubio, director del Centro Provincial del Libro, un añorado retrato de José Martí pintado por el artista Mayito Fabelo.

Escuche el reporte de Leonor Esther Martínez, a propósito de esta fiesta de la Cultura en Villa Clara