En el Día Mundial de los Animales, este 4 de octubre, millones de personas en el planeta abogan por el bienestar de todas las especies. La fecha, instituida desde 1929, como iniciativa de la Organización Mundial de Protección Animal en el Congreso de Viena, recuerda que cada vida merece respeto.
La conmemoración coincide con la festividad de San Francisco de Asís, el Santo Patrón de los animales, y resulta una llamada a la acción: a preservar el hábitat natural en vida salvaje para evitar la desaparición de especies, así como a controlar las que se encuentran en situación de calle en zonas urbanas.
Según Naciones Unidas, de las 8 mil 300 razas de animales conocidas, el 8% permanece extinta y el 22% se halla en peligro de desaparecer. Unas cifras que sitúan a la Tierra al borde de lo que algunos científicos han denominado como la sexta gran extinción.
Carlos Álvarez, experto en gestión ambiental de México, aclaró que las prácticas habituales del hombre desgastan la naturaleza. Entre ellas la cacería ilegal, los incendios de los bosques, la tala indiscriminada y los hábitos alimenticios que priorizan la proteína animal.
En Cuba, país miembro de la Organización Mundial de Sanidad Aninal (OMSA) desde 1972, la ley No. 31 aprobada hace 4 años, procura el bienestar y la protección de los recursos naturales, la flora y la fauna, en aras de contribuir a un medio ambiente sano.
Mónica Puente Visvet, asesora jurídica del Centro Nacional de Sanidad Animal, señaló que este cuerpo legal gestiona los derechos y medidas a tener en cuenta para los que optan por el maltrato y la desatención.

La Dra. María Gloria Vidal Rivalta, Médico Veterinaria y Especialista del Centro Nacional de Sanidad Animal del Ministerio de la Agricultura, agregó que ante la denuncia bien formulada en cada provincia cubana, un equipo de investigadores escudriña cada caso para dar respuesta inmediata.
Vidal Rivalta señaló, además, que Cuba sigue el enfoque de "Una Salud", que reconoce la interdependecia entre la salud humana y la sanidad animal, vinculadas a los ecosistemas en los cuales coexisten.
De ahí que enfatizó en aspectos claves como la higienización de los hogares, la adecuada alimentación de las mascotas, garantizar los cuidados y la atención médica, así como el tiempo que se le debe dedicar a cada animal.
En el contexto global, la efemérides exige reflexionar sobre problemas urgentes. Más de 3 mil cetáceos aún viven en cautiverio en acuarios del orbe, miles de millones de animales de granja continúan en sistemas de producción intensiva, mientras numerosos tigres y elefantes se explotan para el entretenimiento.
En consecuencia, el Día Mundial de los Animales se erige como un catalizador para la educación y la defensa de los derechos de los seres vivos.

En Cuba se avanza, con desafíos visibles, aseguró María Gloria Vidal Rivalta, especialista del Centro Nacional de Sanidad Animal. Todavía resulta necesario implementar estrategias que promuevan el respeto animal en las diferentes enseñanzas, ganar en cultura de bienestar por parte de la población y abrir centros de acogida en todos los territorios del país.
Pensar cada 4 de octubre con seriedad implica adoptar un enfoque colaborativo, multisectorial y multidisciplinario. La protección de las especies es, en esencia, una obra colectiva.